Cabeza de muerte (2007)

Año: 2007
País: Irlanda
Dirección: Paddy Breathnach
Reparto: Lindsey Haun, Jack Huston, Max Kasch
Productora: Capitol Films
Ficha doblaje: Ficha de Cabeza de muerte

Cine de «terror». Un grupo de jóvenes americanos se van de viaje al viejo continente para drogarse con unas setas alucinógenas, pero una de ellas se come por error unas venenosas y empieza a tener visiones surrealistas relacionadas con una antigua leyenda de la comarca.

Hasta ahí muy bonito, luego empieza la película y los clichés empiezan a brotar como setas (y nunca un paralelismo fue tan acertado como éste). Para empezar, los protagonistas son una panda de aparentes adolescentes (aunque deben rondar los veinticinco para arriba) idiotas tan tipicamente yankees: un mojigata casta y pura y rubia; dos asiáticas: una que va de casta y tonta pero su vida sexual es más potente que la de Pocholo y otra sacada del ropero del señor Zara; un bakala con sus oracos que se mete esteroides y cumple el tópicos: cachitas guapo que va de guay y tiene 4 neuronas, 3 de ellas podridas y la otra se comió la manzana de Blancanieves; un pseudohippy de viva la virgen que chachiguay es todo melenitas; y, cómo no, el guaperas de turno con su barba y perilla súper atractivo del que la prota está enamorada pero él pasa de ella.

Ya tenemos los ingredientes de típica película para adolescentes. Ahora añadimos los del terror: ponga música de misterio, y haga que las cosas de terror aparezcan de golpe. Ejemplo claro: uno se acerca a una puerta entreabierta mientras suena la musiquita. Y cuando la abre… ¡CHAN! Tío con máscara, puñal y dientes afilados se levanta (sí, el efecto de cámara hace que parezca que está sentado en el suelo y se levante de golpe) y «BUUUU». Muy visto en el cine, pero una vez vale. Dos… bueno. Ahora, que TODOS los momentos de miedo sean así, pues mire usted, uno a media película grita «me abuuuuroooo».

Lo peor de todo no es que cumpla con todos los clichés del cine de terror, sino que cumple todos los malos y poco creíbles. Como esos de que te estás muriendo de miedo y hay una habitación medio a oscuras y se oye un ruido dentro. ¿Qué haces? Pues lógicamente acercarte y mirar qué hay dentro, mientras gritas «¿Hola?» para que el fantasma/asesino se entere que, efectivamente, estás allí. Y efectivamente, la película se basa en hora y media de eso, mientras la musiquita de misterio suena. No sólo eso, sino que intenta dar miedo con sustos que luego no son, como cuando las chicas acaban de ver no se sabe qué y han parado a descansar después de haber corrido como unas lokazas que han visto al Bisbal pegando berridos (sin duda la mejor forma de ahuyentar a un asesino), y una de ellas le pone una mano en el hombro para tranquilizarla. Buen intento, si no fuera porque en lugar de hacerlo suavemente, le arrea un soberano manotazo en el hombro que casi se lo disloca.

Y hacia el final es ya de risa. Cuando sólo quedan la protagonista y el guaperas, ella le dice que la acompañe, que juntos saldrán de ella. Medio segundo después, se detienen en el bosque y ella le dice «quédate aquí», mientras se va sola armada con un hacha a comprobar el ruido que ha oído por ahí. ¿Pero no le acabas de decir que permanezcáis juntos?

Tristemente para todos, incluso para mi mismo, se lleva la peor puntuación de la historia de ésta aburrida página.

LO MEJOR: