Capitán América: Brave New World (2025)

Año: 2025
País: Estados Unidos
Dirección: Julius Onah
Reparto: Anthony Mackie, Harrison Ford, Danny Ramirez
Productora: Marvel Studios, Walt Disney Company
Ficha doblaje: Ficha de Capitán América: Brave New World

Vuelve el primer vengador, pero esta vez de la mano de Sam Wilson, quien fue conocido anteriormente como Falcon y heredó el manto tras los acontecimientos de Infinity War.

El general Thadeuss Ross celebra su recién elección como nuevo presidente de los Estados Unidos. Unos meses después, el Capitán América es enviado a Mexico para evitar la venta ilegal de un objeto robado al gobierno por parte de la Sociedad de la Serpiente. Tras ello, Ross invita a Wilson y a su compañero Joaquin Torres a una fiesta en la Casa Blanca.

Ross ofrece una charla privada durante la fiesta en la que presenta un nuevo metal descubierto durante las investigaciones realizadas en la misteriosa isla que se formó tras la aparición del Tiamut celestial, y que eran el objeto robado que recuperaron: el adamantium. Durante la presentación, Isaiah Bradley, un soldado amigo de Sam Wilson con el que en el pasado se experimentó con el suero del supersoldado, pierde el control y dispara contra el presidente.

Capitán América: Brave New World supone el inicio de la nueva fase del Universo Cinematográfico de Marvel después de los epílogos (o prólogo según se mire) que fueron las películas del multiverso.

Como tal, se presenta como una cinta algo sencilla, sin demasiadas sorpresas. No es que sea aburrida, sino que se presenta como una introducción a una nueva saga. Conecta con la historia contada hasta ahora e incluso con alguna de las primeras películas del UCM.

La trama es simple pero efectiva, mostrando un mundo de conspiraciones que encajan como un puzzle. Conspiraciones más a pequeña escala de lo que hemos visto anteriormente, pero que sirve para avanzar en la historia. La suspensión de la incredulidad, como ocurre siempre con Marvel, juega un papel importante en ella.

Los efectos especiales están, como siempre, a la altura de las expectativas. Sin embargo, no ofrecen nada nuevo. Y es que Marvel nos ha malacostumbrado a grandilocuencias visuales incluso en sus producciones más simples y ya hace tiempo que nos dejaron de sorprender.

Los personajes funcionan bien y tienen cierta química entre ellos. Sam Wilson hace de un excelente segundo Capitán América, consciente de que es admirado por mucha gente y a la vez deseoso de poder algún día llenar las botas de Steve Rogers, dándole así un toque de humanidad.

Harrison Ford como presidente Ross es un muy buen reemplazo del desaparecido William Hurt. Ford interrpeta de forma estupenda su personaje de político restringido voluntariamente pero que en cualquier momento puede explorar, mostrando su dualidad entre sus principios y sus intenciones.

Un nuevo inicio para Marvel tras un largo tiempo sin estrenos cinematográficos. Una película de presentación y a la vez continuación que nos hace preguntar qué nos depara el futuro, aunque no deja nada épico detrás. Aparece en el momento adecuado tras la fatiga pospandemia.

LO MEJOR: