Cazafantasmas 2 (1989)

Año: 1989
País: Estados Unidos
Dirección: Ivan Reitman
Reparto: Billy Murray, Dan Aykroyd, Harold Ramis, Ernie Hudson, Sigourney Weaver
Productora: Columbia Pictures
Ficha doblaje: Ficha de Cazafantasmas 2

Cinco años después de convertirse en un fenónemo mundial, y tras el éxito de la serie de animación, llega la segunda parte de los exterminadores de fantasmas.

Han pasado cinco años desde que los Cazafantasmas salvaran Nueva York y el mundo de Gozer el Gozeriano, y han pasado de héroes a fracasados. Quienes los admiraban ahora les consideran un fraude y para la opinión pública no son más que unos charlatanes.

Sin embargo, un nuevo peligro crece bajo las calles de la ciudad. Un rio de mocos rosas está invadiendo el subsuelo, y su origen parece ser el museo de arte, donde actualmente trabaja Dana Barrett como restauradora de obras y al que hace poco ha llegado un enorme cuadro con una misteriosa figura conocida como Vigo el Cárpato.

La segunda parte de los Cazafantasmas llega como una caída y resurgimiento de la franquicia tras su paso por la televisión.

Esta continuación presenta una estructura bastante similar a la primera, presentando en el primer acto el ascenso (de nuevo) del equipo, un segundo acto con la constatación del enorme peligro que acecha, el intento de aviso a las autoridades que no solo no les toman en serio sino que llegan incluso a inhabilitarlos, y un tercer acto con el enfrentamiento final, con su final feliz.

También conserva el humor de la anterior, con nuevos chistes que han pasado a la historia de la franquicia, y trae novedades como la evolución de la relación entre Peter y Dana o la de Janine y Louis. Además, presenta a un nuevo personaje: Janosz, interpretado por un Peter MacNicol pasado de rosca (a quien veríamos más adelante como Renfield en la parodia de Drácula de Mel Brooks protagonizada por Leslie Nielsen) en una excelente actuación que sobresale del resto por su excentricidad.

Los efectos especiales mantienen su nivel respecto a la primera parte, a caballo entre cutres y buenos. Con la idea de mantener el factor cómico a la aventura, la parte visual sabe cuándo toca ser burda (fantasmas absurdos) y cuándo tomarse en serio (las apariciones de Vigo dentro y fuera del cuadro).

Una segunda parte que en su momento dejó un buen sabor de boca pero que para los espectadores quedó un poco corta y dejó con ganas de más, cosa que no se cumplió hasta 25 años después.

LO MEJOR: