Birdman (o la inesperada virtud de la ignorancia) (2014)

Año: 2014
País: Estados Unidos
Dirección: Alejandro González Iñárritu
Reparto: Michael Keaton, Emma Stone, Edward Norton
Productora: Fox Searchlight Pictures
Ficha doblaje: Ficha de Birdman

Película que conquistó cuatro premios Oscar en la edición de este año, incluyendo el de mejor película y mejor director.

Riggan Thomson (Michael Keaton) es un actor reconocido por su papel como el superhéroe Birdman hace 20 años. Incapaz de desestancarse de ese personaje de cara al público, y con un enorme ego interpretativo, se embarca en escribir, dirigir y representar una adaptación teatral del libro de historias cortas What We Talk About When We Talk About Love. La obra la produce su amigo Jake y la coprotagoniza su novia Laura y el actor Ralph.

Durante los ensayos, un foco cae encima de Ralph y lo deja malherido e incapacitado. Riggan confiesa que fue cosa de él para deshacere de Ralph, y en su lugar contrata a Mike (Edward Norton), un brillante actor que, no obstante, le produce mas dolores de cabeza debido a su comportamiento errático, fastidiando el preestreno porque Riggan le cambia en escena una botella de alcohol por una de agua o quitándole el protagonismo de las entrevistas ante la prensa.

Además de tener que lidiar con todo esto, tiene que encargarse de su hija Sam (Emma Stone), una joven rehabilitada que ha vivido con la figura del padre ausente y trabaja como asistente del mismo. Thomson ha de intentar reestructurar a su família mientras persigue su sueño de volver a la notoriedad interpretativa.

No cabe duda de que Birdman es una película hecha expresamente para Michael Keaton, y que sigue (con muchas licencias, todo hay que decirlo) la estela de la vida interpretativa del actor desde su papel en Batman (1989). De hecho, las similitudes entre la historia y la realidad son tales que incluso se habla de una cancelada tercera entrega de Birdman que Thomson iba a interpretar, exactamente igual que la tercera entrega del hombre murciélago. Sigue, además, la historia de cómo Thomson (y en cierta parte Keaton) pasó de ser un actor de renombre y cierta popularidad a casi desaparecer del mundo escénico (al menos para ojos de los espectadores).

Por otro lado, la historia también hace un enfoque a otros dos puntos: el primero, el ego del artista, siempre buscando ser el foco principal de atención aún cuando su tiempo ya ha pasado. La puesta en escena de la obra teatral es, evidentemente, un intento de volver a ser relevante, volver a ser «alguien». Riggan lo fue en su momento con Birdman, y aunque lo intentó muchas veces no consiguió la misma relevancia que con el superhéroe. Por ello tiene al voz del personaje en la cabeza (que en realidad es la voz de su ego) recordándole los buenos tiempo e incluso proponiéndole recuperarlos en un momento en el que las películas de superhéroes están en auge.

Y ese es precisamente el segundo punto, aunque se trata solo de un punto anecdótico (pero interesante a comentar): el director Iñárritu es conocido por ser crítico con el género de superhéroes y con los actores que enfocan su carrera en él. No cabe duda que los superhéroes son EL género de esta década como lo fue el western en los sesenta y el cine negro en los treinta.

Se ha hablado mucho del falso plano secuencia de la película que, si bien parece extraño dado que no estamos acostumbrados a él (y en alguna ocasión cansa al hacer transiciones largas que nos mantienen en espera), nos permite seguir un poco más a cada uno de los personajes en sus pequeñas historias. Este seguimiento de los actores está ligado a la obra de teatro que están preparando: en el mundo del teatro no se puede cortar y repetir una escena, sino que hay que hacerla hasta el final.

Entretenida película que nos hace reflexionar sobre el mundo moderno de la interpretación y se ha ganado la admiración de críticos y espectadores.

LO MEJOR: