The Amazing Spider-Man (2012)

Año: 2012
País: Estados Unidos
Dirección: Marc Webb
Reparto: Andrew Garfield, Emma Stone, Rhys Ifans
Productora: Sony Pictures
Ficha doblaje: Ficha de The Amazing Spider-Man

5 años después de la última aparición del trepamuros en la gran pantalla, nos llega este reboot de la saga.

La película sigue los pasos del joven Peter Parker en su adolescencia durante los acontecimientos ocurridos que le llevaron a conseguir sus superpoderes. Cuando Peter descubre en el desván unos documentos de su padre sobre una investigación genética en la que estaba trabajando junto al doctor Curtis Connors, decide hablar con el científico para encontrar respuestas.

Connors y Peter deciden trabajar juntos para mejorar y perfeccionar el suero regenerativo, en el que el doctor y el padre de Peter estaban trabajando. El doctor Ratha ve potencial en el suero y presiona al doctor para que empiece cuanto antes el tratamiento con humanos. Cuando Connors se queja por el poco testeo que se ha hecho con él, Ratha lo despide.

Hace solo diez años que salió la primera película de Spider-Man y este nuevo reboot tiene un sabor extraño. El proyecto empezó como la cuarta parte de la saga y terminó en esto. Además, diez años creo que son insuficientes para hacer un remake, especialmente cuando la franquicia ha seguido y apenas hay 5 años de diferencia entre la última y la nueva.

Andrew Garfield como Peter Parker es una elección regular. Sí, aparenta menos edad de la que tiene. Pero tiene rasgos faciales propios de quien ya ha pasado los veinticinco, y es muy gracioso (en el mal sentido) verle patinar por los pasillos del instituto.

La película intenta, como bien puede, alejarse lo más posible de repetir el patrón de la que pretende ser remake. Por ello, cambia algunos puntos y se centra más en otros, lo que hace que la historia pierda interés. Además, algunos personajes son reemplazados (Gwen Stacy sutituye a Mary Jane) y la historia de amor se ve mucho más forzada.

Lo peor es que la muerte del tío Ben nos da un poco igual. La historia está construída regular y le falta el toque sentimental que tuvo en la primera, y además la película le da el toque que necesitaba para que nos preocupáramos por ello cuando ya ha pasado todo, más adelante. Y es una pena que eso ocurra cuando el actor que interpreta a Ben es una cara conocida (Martin Sheen).

Un remake visualmente interesante pero temporalmente innecesario. Veremos en qué termina.

LO MEJOR: